martes, 9 de septiembre de 2008

Las puertas del Infierno



He caminado toda mi vida sin rumbo fijo, sin saber el motivo de mi peregrinar, jamas he encontrado un lugar donde me haya sentido como en casa, quizás sea porque nunca he tenido casa o simplemente es que no conozco esa sensación de la que todo el mundo habla, pero no me ha importado, sigo adelante paso a paso, aunque cada vez su sonido es más lento y pausado, no tengo prisa por llegar a ninguna parte, disfruto de cada momento, de las vistas del camino y si puedo de la compañía de esos transeúntes ensimismados en sus propias vidas, a veces es interesante ver como tropiezan una y otra vez en la misma piedra, mientras que me quedo sentado completamente absorto pensando como son capaces de no verla, si es enorme. Pero no importa lo más mínimo, son simplemente vidas que pasan a mi alrededor y son incapaces de verme, no es que sea transparente, ni mucho menos me escondo de ellos, solamente que esas vidas, personas, caminantes, o como queráis llamarlos, son incapaces de ver más allá de su nariz, no ven más allá de su pequeño mundo, no quieren darse cuenta de que están rodeados de una inmensidad abrumadora de sensaciones y cosas nuevas por conocer, peor para ellos. Pero como siempre, es divertido verlos caminar, aunque muchos den más pena que risas.

Otro paso más, otro camino terminado, más lugares visitados y siempre igual, aunque espero que lo que veo a la lejanía tenga algo de especial, ya que es inusual encontrarse una puerta en mitad de un camino, y más aun cuando el camino esta tan transitado, ardo en deseos de conocer el motivo de su existencia, adivinar que es lo que guarda detrás, siempre he sido demasiado curioso para ser un vagabundo, pero eso siempre ha hecho que todo sea mas divertido y complicado a la vez, de cuantas situaciones espeluznantes he salido y en muchas más me he metido por esta curiosidad, no puedo esperar más, voy a empezar a correr.

Miro la puerta en todo su esplendor, no es como me la he imaginado, no es tan grande como esperaba, ni tan recia, es mas bien una especie de portón, lleno de cicatrices del paso paso del tiempo, cuidado más bien poco y con un extraño cartel en todo lo alto, que dice.... no soy capaz de descifrar lo que dice, entre que esta escrito en una lengua que no entiendo y que ya mi vista no es lo que era, soy incapaz de leerlo, pero que más da, solo tengo que preguntar, alguien lo debe de saber.

Me acerco a un hombre que esta parado contemplando la marea de gente que pasa y le pregunto que pone en ese dichoso cartel, me mira fijamente, pero no me esta viendo, sus ojos están vacíos, no tienen expresión, han perdido toda vida, pero aun así me mira y me dice... Estas son las puertas del Infierno... y tal y como termina deja de mirarme, como si yo no existiera, como si no tuviera mil preguntas más que hacerle después de esas palabras, pero por mucho que digo y hago, sigue imperturbable mirando como pasa la gente.

Las puertas del Infierno, debería de estar notando una mala sensación, algo que me dijera que no estoy en el lugar adecuado, ese instinto animal que todos deberíamos de tener que me pusiera a correr hasta olvidar esta puerta, pero no, estoy completamente tranquilo, con una serenidad que jamas había conocido, no tengo ningún tipo de malestar y solo me atormenta una inquietud, pero no por mucho tiempo, voy a entrar, tengo que mirar que hay detrás de esas puertas, un paso más, lento pero a su vez decidido, sin necesidad de mirar atrás, otro paso y ya las habré pasado, y ahora puedo ver lo que hay dentro del Infierno...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, esta es mi primera vez asi que lo hare con delicadeza.
Me parece increible la manera de plasmar tu pensamientos y sentimientos, por favor no dejes de escribir de esa manera.

Olvidado dijo...

No te preocupes que seguire haciendo, es una de las maneras que tengo para escupir todo lo que llevo dentro de mi, y mas de una vez me ha sido muy util. Y puedes escribir siempre que quieras, ya sabes que esta es tu casa.

Anónimo dijo...

Yo escribia como tú...Bueno, yo no, ya que yo no soy el que era...
Que complicado... ahora mismo no se quien escribe, si yo o él... o ambos.
Me encanta esa foto de la muerte.
Si te fijas en su cara la verás triste...

Anónimo dijo...

pues yo no se todavia si es cierto o no y tu que crees de eso espero k tu tambien te lo preguntes